- Mamá esta reuniéndose en Londres con el consejo. Así que os tendréis que conformar con mi maravillosas artes en la cocina. - dijo ella, mientras se burlaba de Alec.
- Clary y Jace ya se han acostado. En todos los sentidos, creo. -
Isabelle
rió y apagó el fuego. Apartó la olla y sacó los espagueti
sirviendo dos platos.
- Tomate? -
- Lo has hecho tu? -
Isabelle
lo fulminó con la mirada,
furiosa,
mientras rociaba su plato de salsa de tomate. Se sentó en la
desvancijada banqueta frente a Alex y revolvió la comida con
aburrimiento.
- Que tal con Magnus? - preguntó
- Muy bien. Dice que no tardará mucho en venirse para aquí. Está tratando de cruzar las fronteras. Aunque los demonios admiten a los subterráneos no se fían. Saben que algunos están de nuestra parte. - respondió el con entusiasmo.
Izzy
asintió sin mucho entusiasmo y mordisqueó los espagueti.
- Que te pasa, Izzy? -
- Nada... Tan solo pensaba... En que tanto Jace como tú habéis encontrado a alguien. Todos han encontrado a alguien. Y yo... yo no. -
- Y Simon? Pensaba que vosotros dos... Ya sabes... Estabais juntos. -
- Ah Simon. - dijo ella sonriendo. - es un gran chico, pero sinceramente, no creo que él lo tome en serio. Ni siquiera yo lo hago. -
- Podrías probar a tomártelo en serio. A lo mejor funciona. - dijo él.
- Bah... No se, quizás lo intente. - respondió mientras cogía su plato y lo tiraba a la basura. - Oh vamos, deja de fingir, puedes tirarlo. -
- Oh, menos mal, pensaba que me obligarías a tomármelo. - dijo Alec aliviado. - anda, vamos a dormir, se está haciendo tarde.
Los
dos salieron de la cocina, cerrando la puerta tras de si.
Abrió
los ojos con dificultad, pestañeando ante la luz. A su lado, Jace
sonreía, apoyado sobre un codo. Su mano se deslizaba sobre su
espalda desnuda, provocándole suaves cosquillas. Ella sonrió y lo
besó suavemente pasando las manos en torno a su nuca.
- Buenos días. - dijo el con dulzura.
- Buenísimos días. - dijo ella contenta –
- Que tal has dormido? -
- Bien. - dijo ella, mientras se estiraba como un gato. - nos damos una ducha?
- Como desees. - dijo el dirigiéndose hacia el baño, totalmente desnudo.
Ella
le siguió y entraron en el baño. Jace abrió el grifo del agua
caliente. Dejó que la bañera se llenara de agua y espuma, mientras
la besaba con suavidad. Interrumpiéndoles, como casi siempre, la
puerta sonó.
- Va chicos, apurad ya. Hay altos niveles demoníacos cerca del Instituto, tenemos que salir ya. -
Jace
se tensó de manera instantánea y entró en la ducha seguido de
Clary. No tardaron mas de cinco minutos en salir, ya equipados y y
armados, cubiertos de runas. Isabelle y Alec los esperaban en la
puerta del instituto. Vestían también el oscuro equipo de cazadores
de sombras.
- Estáis listos? - preguntó Alec
Jace
asintió y los cuatro salieron del Instituto.
Isabelle
hizo una mueca de asco cuando percibió el rancio olor de los
demonios. Se encontraban en un vertedero antiguo, que ya olía mal
antes, pero empeoró con la aparición de los demonios. La tierra
estaba sucia y mugrienta, llena de botellas con distintas etiquetas
de alcohol, ya ilegibles por el paso del tiempo. El lugar debía
medir varios kilómetros, y en el centro, se amontonaban un montón
de chatarra, y vehículos estropeados.
- El sensor dice que los demonios están ahí. - dijo Jace señalando la pila de basura.
- Entonces, a que esperamos? - preguntó Clary con impaciencia.
- A saber, principalmente, si son Demonios Mayores. Así, por puro amor a la vida. - respondió Alec en tono cansado.
Clary
se sonrojó avergonzada. En realidad, había cambiado mucho en el
último año. Desde la invasión, había comenzado a entrenar sin
parar, para lograr estar a la altura de sus compañeros. Pero su
temeridad no había cambiado.
- El sensor no da niveles altos. Una hydra quizás. No mucho mas. -
- Estamos listos entonces. - dijo Isabelle.
Avanzaron
sigilosamente, y cuando ya estaban frente a la enorme barrera de
trozos de metal oxidado comenzaron a escalar. No tardaron en llegar
al interior. Era como estar en una especie de sala circular,
compuesta por paredes de metal, con todo tipo de piezas de chatarra
colocadas de tal manera que parecía una estructura extremadamente
delicada. Como si al quitar una pieza se fuese a derrumbar de pronto.
Carecía de tejado, por lo tanto no les costó reconocer la silueta
de un delgado y siseante ser que que los esperaba al otro lado de la
estancia. A su alrededor, yacían cuerpos humanos, sin vida.
- Una hydra. - dijo Jace satisfecho. - lo sabía.
- Yo esperaba un poco más de diversión. - dijo Isabelle, que parecía realmente decepcionada.
Como
atendiendo a su petición una decena de lagartos escamosos
aparecieron alrededor del Demonio.
- Satisfecha Izzy? - preguntó Alec desenfundando un cuchillo de serafín
- Mucho mejor. -
Isabelle
saltó sobre el primer animal clavando una daga en su cabeza, y
blandió el látigo acabando con un segundo. Pronto se le unieron sus
compañeros, moviéndose con pasmosa velocidad. Clary, al ver las
intenciones de la hydra de atacar a Jace se dirigió hacia el enorme
ser de piel escamosa. Lanzó una daga hacia el hombro del monstruo
que rugió enfadado. Moviéndose con mas rapidez de la que la joven
esperaba, el Demonio alcanzó su espalda, dejando tres profundos
tajos, originados por sus garras. Clary chilló dolorida, pero se
mantuvo en pie, y no tardó en hacer caer al Demonio. Cuando ya
estaba a punto de desmayarse por el dolor, unos brazos suaves y
firmes la sujetaron con delicadeza.
- Insensata... -
Trató
de abrir los ojos, luchando contra la pesadez de sus párpados. No
era capaz de moverse, ni siquiera la punta del dedo.
- Alec! Ayúdame. - era la voz de Jace – quieta Clary, quieta idiota... - pero, si no me estaba moviendo.
- Ponla de boca abajo, hay que desinfectar las heridas. - dijo Alec con voz autoritaria.
Las
suaves manos de Jace la cogieron para girarla después, y le quitaron
la camiseta. Trató de resistirse ante eso, pero seguía sin tener
control sobre su cuerpo.
- Relájate, tranquila. Escucha, tienes una herida en la espalda vale? No intentes moverte, tienes morfina. Relájate. - dijo la suave voz de Jace junto a su oído.
Alguien
desabrochó también su sujetador, y por una vez, Clary agradeció
estar boca abajo. Notaba un fuerte ardor en su espalda, que aumento
de pronto cuando un fresco líquido cayó sobre la herida. Quería
gritar, y no podía. Quería moverse y no podía. Se sumió en un
estado de semiconsciencia, en el que practicamente no percibía lo
que sucedía a su alrededor. Detectaba a veces, la voz nerviosa de
Isabelle, o las manos suaves de Jace sobre su piel. Alcanzó a oír
la voz de Magnus quejándose de las muchas heridas que se hacían los
Nefilim, y lo incómodo que era curarlas. Cuando se despertó por
fin, ya no sentía dolor. Abrió los ojos con lentitud y observó el
perfecto rostro de Jace, que la miraba con dureza. Suspiró. Sabía
lo que le esperaba.
-Sabes
lo extremadamente inconsciente que has sido verdad? - Preguntó él.
- Reaccioné por instinto, estabais todos con los rapiñadores así que fui a por la hydra. Lo siento. - dijo ella
El la
miró con fijeza clavando sus brillantes ojos dorados en su rostro.
Después sonrió y la besó con cuidado. No iba a recriminarle nada.
El habría hecho lo mismo.
- Llevas ocho horas inconsciente. La herida tenía veneno de demonio, así que tuvo que ser Magnus quien te la curase. Nos tuviste a todos un poco histéricos. - dijo el.
- Puedo levantarme ya? - preguntó
- Si. - dijo el suspirando.
Ella
se destapó impaciente, y se levantó. Poniéndose de puntillas, besó
suavemente a Jace, quien devolvió el beso volviendo a tumbarla en la
cama. Acarició suavemente las recientes cicatrices de su espalda
mientras sus labios rozaban su cuello. Ella introdujo las manos bajo
su camiseta, rozando las distintas y suaves Marcas de su espalda.
- Podría entrar cualquiera. - dijo ella, nerviosa.
El se
alejó y activó el pestillo de la enfermería sonriendo. Se pasó la
camiseta por los hombros y la dejó caer, de modo despreocupado.
Clary lo observaba sentada, en la camilla. El se acercó de nuevo y
la empujó suavemente, tumbándola bajo el, mientras buscaba el
cierre del sujetador. Pero, la puerta de abrió de pronto.
- Oh vamos, quien es ahora? - preguntó Jace
- Soy yo. - respondió Magnus. - Y no es mi culpa que seáis un cúmulo de hormonas alteradas andantes.
- Que sucede?
- Tengo que hablar con todos vosotros. Alec ha llamado ya a vuestro amiguito vampiro y viene hacia aquí. Dentro de una hora, os quiero a todos en el Salón. - dijo con voz autoritaria. - ahora, seguid a lo vuestro.. Ah y os he roto el pestillo. Mis disculpas. - añadió cerrando la puerta.
- Ya lo has oído. Sigamos a lo nuestro. - dijo Clary mientras lo tiraba sobre la cama de nuevo.
Las calles, antes
resplandecientes de la Ciudad de Cristal, estaban ahora cubiertas de
sangre, y armas caídas. Los demonios corrían y mataban a sus anchas
mientras, los aterrorizados Cazadores huían atemorizados.
- Debemos ir al Salón – gritó Jace. - Allí estarán los que queden.
Clary asintió y siguió
a Isabelle y Jace, que comenzaban a abrirse paso, dejando cuerpos de
demonios muertos a su paso. Ni siquiera sabían como habían logrado
llegar al Salón de los Acuerdos, pero lo lograron. Izzy sangraba por
un costado y Jace cojeaba caminado con dificultad. Maryse se lanzó
sobre ellos sollozante, al verlos entrar, abrazó a Isabelle y a Jace
entre lágrimas, y sollozos contenidos. Se apartó un poco y extrajo
su estela, poniéndose manos a la obra. Clary se apartó buscando a
sus amigos con la mirada. Alcanzó a ver a Alec acercándose y a
Simon detrás del.
- Clary! - gritaba Simon
- Simon! - gritó ella corriendo hacia él, que la recibió con un abrazo. - pensaba que...
- Clary, ya no pueden matarme. - dijo el muy seriamente. - en realidad, hice explotar un par de demonios, sabes que salen fuegos artificiales cuando mueren? - su mirada se desvió hacia el lugar donde les esperaba Jace. - Creo que te necesitan.
Se acercaron al pequeño
grupo de Cazadores que se había formado. Jace no dejaba de mirarla,
como si la compadeciese. Ella se acercó, apresurada.
- Que ha pasado? -
Todos se giraron hacia
ella, observándola con la misma compasión que Jace. El la agarró
por sus muñecas y la apartó un poco del gentío.
- Clary... - dijo él. - Tu madre, no ha vuelto. Debemos irnos. Ahora.
- No, no me iré sin ella! Tiene que estar ahí fuera, mientras todos vosotros os limitáis a huir como cobardes. Iré a buscarla, aunque sea sola. - gritó ella.
Antes de que pudiese
salir corriendo, los brazos de Jace la rodeaban, retendiéndola
consigo.
- Debemos irnos Clary, debemos irnos. - dijo
Trató de debatirse
pero era imposible. Observó, como Magnus abría un portal. Sollozó
suplicante mientras Jace la arrastraba hacia la huida. Chilló,
gritando lo cobardes que eran, o las miles maneras de las que se lo
haría pagar, pero no pudo evitar cruzar el portal. Dejando a su
madre atrás. Y junto a ella, lo mas probable, es que estuviese Luke.
"tienes morfina?" lo reconozco leyendo eso estaba kgdusvdkd esta genial como siempre <4 <3
ResponderEliminarJajaja muchas gracias, me alegra que te guste!
Eliminarni que darlas esta genial y ya sabes si necesitas cualquier cosa ya tienes mi correo
EliminarOMG. ¡Vaya capitulazo Clary! Sigue así y me tendrás enganchadita todas las semanas aquí, jejejeje.
ResponderEliminarMuchos besos, Annie<3
Muchísisimas graacias! Me alegra que te guste jijiji, a ver cuando subes tu uno eh! Otroos :33
Eliminar¡ASJDGBDÑEKWLEIJBEJCB Y TAL! Tú entiendes ;)
ResponderEliminarJAJAJAJAJA
ESTUVO GENIAL, en serio. Morí de amor. Aunque estoy de acuerdo con Magnus, esas hormonas... ;) ¡Que monos, Dios! CLARY, TÚ NOS DAS EL SEXO QUE NO NOS DIÓ CASSANDRA (?) (Aunque realmente aun no hayas "narrado" la escena... ¬¬ PERO ALGO ES ALGO :3) Vale, sí, MENTALMENTE DESORIENTADA...
¿EN SERIO, CLARY? Creo que Jocelyn está ya un poquillo cansada de desaparecer, ¿eh?... Aunque no te mataré si lo arreglas, Y PRONTO ;)
Po' eso, QUE SUBAS LA ESCENA, QUE NO ES PORNOSA (?) JAJAJAJA
¡Ya hablaremos! ‹з
Verano Número 16
http://veranonumero16.blogspot.com.es
JAJAJAJAJAJA ai, eso va en el capítulo 4 :33333 JAJAJA Estoy compensando el tiempo que perdieron JAJAJAJAJA
EliminarAh no se no se, a lo mejor desaparece definitivamente!
JAJAJAJAJAJ LA VOY A SUBIR AHORA!
Otroooo :33